¿Cuáles son los principales objetivos y enfoques de esta edición 2024 del Another Way Film Festival?
Nuestro fin es el de abrir espacios seguros, sin tapujos ni agendas ocultas para poder hablar de la crisis ecosocial en la que estamos inmersas. Deseamos informar, educar y sensibilizar a la ciudadanía ante este reto y lo hacemos a través del cine más arriesgado, tanto por los temas que tratan las películas como por su forma. También lo hacemos con actividades dirigidas a todos los públicos para así ofrecer herramientas tangibles que empoderen y nos ayuden a ser partícipes de un cambio positivo.
Este año, la décima edición del festival, nos centramos en las visiones de futuro. Creemos que es esencial proyectar futuros optimistas, pero realistas, para ponerse manos a la obra. Si lo pensamos por un instante, todo lo que existe hoy ha sido imaginado. O dicho de otra forma, creamos la vida (y/o el futuro) que queremos vivir. Es por eso que tanto las sesiones especiales como la Sección Orígenes han sido elegidas y programadas bajo esta visión.
El resultado son unas sesiones tan sensoriales y especiales como Nanook, el esquimal, considerado el primer documental de la historia, que podrá disfrutarse con música electrónica en directo; o las películas que provocan nuestra visión de futuro como Star Trek IV: Misión: salvar el planeta o Tiempo después de José Luis Cuerda.
El programa de la edición 2024 es muy amplio, pero ¿nos podrías destacar tres convocatorias que sean especialmente interesantes desde tu punto de vista?
A parte de las que os acabo de mencionar, la Sección Oficial nos trae nueve estrenos en España, cada cual más impactante y emocionante. De esta sección resaltaría La Ferme des Bertrands de Gilles Perret, donde somos testigos del relevo generacional de una granja familiar entrañable que nos recuerda con una sonrisa los valores de la familia, la herencia y el cuidado mutuo, con imágenes desde los años 60 hasta hoy.
Por otro lado, y con un tono muy diferente, me parece esencial visionar Etat de nécessité de Stephane Goel. A lo largo de esta película, acompañamos a jóvenes acusados de desobediencia civil y su camino entre los entresijos de la justicia europea. La película eleva un debate muy necesario a día de hoy frente a la inacción climática por parte de gobiernos y grandes corporaciones.
Por último, tenemos que visitar la Sección Impacto donde recuperamos títulos que el circuito comercial de cine no ha prestado especial atención, pero que creemos que son relevantes. Aquí resaltaría la conmovedora y alarmante Rejeito de Pedro de Filippis. La película nos presenta una comunidad inolvidable que está viviendo bajo el abuso de las grandes empresas mineras. Su resiliencia y su fuerza son fuentes de inspiración y nos despiertan un profundo sentimiento de injusticia sobre una situación en que todos podemos llegar a ser víctimas.
Por la experiencia de ediciones anteriores ¿cuáles crees que son las temáticas que más interesan al público asistente? En otras palabras, ¿qué nos preocupa más sobre las múltiples crisis ambientales y sociales?
Es difícil generalizar, pero sí que hemos observado que, nuestro público al menos, tiene un claro interés por todos los temas ambientales, antes que los sociales. Igual con una diferencia muy pequeña, pero sí que las películas que tienen un corte puramente social no reciben la misma respuesta. Aunque son indisociables, ya que ahí donde se vulneran derechos ambientales se vulneran derechos humanos, es una cuestión de relación con el entorno.
Podría destacar que los temas relacionados con la alimentación e industria agroalimentaria son de gran interés, y lo resalto no sólo por la afluencia en sala, sino por la participación en los coloquios posteriores ya que en el caso de estas películas es significativamente más intensa. Posiblemente porque es algo con lo que todas podemos relacionarnos de manera muy directa. También hemos comprobado que resulta de mucho interés los documentales sobre trato y derecho de los animales. Suelen ser sesiones exitosas en ambos aspectos también, aforo y participación en el coloquio.
A nivel global ¿en qué momento se encuentra la creación y filmación de documentales sobre sostenibilidad y medio ambiente?
El género documental en general está en un momento particularmente interesante. Es un género que cada vez suscita más interés tanto para el público como, por tanto, para los festivales de cine de clase A, las plataformas y cadenas de televisión. Por ejemplo, el Festival de Cannes ha creado una sección de cine medioambiental y el festival de San Sebastián en colaboración con Greenpeace ofrece un premio a la película que mejor transmita los valores de la ONG. Estos son solo dos ejemplos pero hay más como la Espiga Verde en Seminci etc. Todo esto canaliza la atención y financiación a estas obras, saber que hay cabida, recursos e interés supone sin duda un fuerte impulso a la creación. Por lo tanto sí, nos encontramos en un momento muy prolífico.
Otro aspecto que me resulta interesante analizar es el punto de vista que se está tomando. El libro Objetivo: Planeta Tierra, escritorio por el periodista Alejandro Ávila Villares, nos da las primeras puntadas de este análisis. En una primera fase, el “documental ambiental” (por simplificar) se ha ocupado de curiosidades de la vida animal exótica donde el ser humano aparece como ajeno a esa realidad. Más adelante, se ha profundizado en la documentación de ecosistemas donde quedaba subrayado el paralelismo con comportamientos humanos. Y, desde hace unas décadas, con su origen en la expansión de sensibilidad ecologista de los años ochenta, pasamos a un documental de sensibilización y denuncia.
En mi opinión, gracias a una información y sensibilización más consolidada, los creadores se están permitiendo ser cada vez más originales en sus formatos. Pueden incidir en la emoción para fomentar la toma de conciencia y alejarse cautelosamente de la realidad para jugar (en el mejor de los sentidos) con el público. Aunque en un principio puede generar cautela por tratarse de temas particularmente sensibles, son ensayos artísticos de gran calado e interés. Solo por dejar un ejemplo, os invito a venir a disfrutar (ya sea en el festival o en FILMIN de manera online) de A Mirror of the Cosmos, una obra que se define a sí misma como un documental de ciencia ficción. Este ejemplo nos muestra que también la incursión artística puede revisitar temas que de otra forma nos parecerían redundantes y repetitivos.
Las nuevas perspectivas y formas de sensibilizar siempre serán bienvenidas en el festival.
Además de la programación oficial, este año habéis organizado cantidad de eventos paralelos ¿Cuáles nos podrías destacar?
Destacaría dos. El primero es Another Café Gospel, que se celebra el domingo 20 de octubre a las 18:00h en la Cantina de Matadero, es un concierto de gospel del coro Soulful Voices dirigido por Ana Santa. Incluimos la música en el festival como celebración, por todas esas pequeñas grandes batallas ganadas a diario. Permitidme la expresión: ¡es un chute de energía! Algo muy necesario para seguir en el camino de la transformación.
El segundo encuentro que querría resaltar, fuera de la programación de cine es Iniciativas visionarias: emprendimientos por un futuro irresistible, que se celebrará el viernes 18 de octubre a las 18:00h en la Biblioteca Eugenio Trías de El Retiro. Se trata de un encuentro al estilo charla TED pero con emprendedores triple balance que tienen en su ADN el balance económico, social y ambiental desde una visión de futuro. No conocemos a personas más optimistas que aquellas que están creando un bien o servicio pensando en el mañana y estamos deseando ofrecer este espacio al público como lugar de inspiración y fuente de recursos coherentes en su propia ciudad.